domingo, 18 de septiembre de 2011

Again.

Para mi los domingos son muy especiales. Me traen muchos recuerdos de cuando navegábamos por las calles sin rumbo fijo o cuando un beso era el fina feliz. Esta fachada me está durando más de lo que pensaba, pero supongo que en días como hoy no me puedo sorprender el echar de menos. De mostrar un poco de debilidad a mi misma. Pero tengo que poner límites. Límites para no olvidar que sus besos estaban manchados con el aroma de otra persona; que a mi hacía tiempo que no me quería como tantas veces me ha dicho y que ahora, ya lo tengo grabado a fuego. Independientemente de lo que piense o no, de que me lo crea o no. Límites para no olvidar que he sido un parking de entrada libre durante mucho tiempo, y que lamentablemente, sería capaz de serlo durante mucho más. No sé muy bien en qué punto se cruza el querer con la estupidez pero yo lo he cruzado muchas veces, y en fin, volvería a cruzarlo muchas más. No sé a quien pretendo engañar, pero si, mordería el polvo infinidad de veces con tal de... Al menos he dejado de dirigirme con un "tú" cuando escribo. Y ese tú... conmigo nada es fácil, ya debes saber.

No hay comentarios:

Publicar un comentario