jueves, 18 de julio de 2013

Medirte a besos las distancias para que se reduzcan a 0.

Tengo unas ganas terribles de escribirte,
y contarte, por ejemplo, 
yo qué sé, 
que no daría nada por una noche a tu lado,
porque las quiero todas;
que me sorprendo a mi misma pensándote,
y que si te pienso,
es porque mis dedos gritan tu nombre,
al igual que yo quiero gritar en tu oído
todas esas cosas
que tus manos van a ir escribiendo en mi piel

Podría repetirte miles de veces las mismas cosas,
podría tatuarte el cuerpo de todas estas ganas,
en aumento,
que se mueren por hundirse en tu piel, 
y lo que no es tu piel;
que se mueren por medirte a besos las distancias
para que se reduzcan a 0;
que piensan devolverte por triplicado
todas las noches,
mañanas,
y tardes que te debo

Podría contarte, por ejemplo,
yo qué sé,
que tengo urgencia de tus labios,
de calcular las distancias de tu cuerpo a mordiscos,
de perderme en tus rodillas,
y en fin,
lo siguiente ya lo piensan mis piernas;
que aquí lo único que pasa,
es que hasta mis huesos te tienen ganas,
porque sí,
llevas la M en el nombre
de Mevasaterminarvolviendoloca

jueves, 11 de julio de 2013

Y me verse despacito, con ganas y con fuerza.

A veces me juego el tipo por pensar que hay más allá,
si después de cerrar el corazón
y abrirlo con horario fijo de 4 a 6 de la mañana;
si después de no encontrarme
pueda llegar alguien y me encuentre,
tendría que decirle, muy bajito,
que no me había perdido,
sino que me estaba yendo

Podré haber perdido trenes, pero no oportunidades;
podré haber corrido kilómetros
sin necesidad de que nadie me persiguiera;
podré haber roto copas,
verdades y mentiras;
quizá incluso corazones,
pero nunca he roto la idea de que el día menos pensado
la suerte llame a mi puerta
y me verse despacito,
con ganas y con fuerza,
con la ilusión de un niño al abrir un regalo,
con la emoción que se desborda en el alma
cuando la oportunidad viene en el tren
y esta vez no se aleja
tan rápido como se apaga una vela al pedir un deseo
suplicando que esta vez no me duela

Prefiero quedarme con el sí de la poe(sí)a
que si a veces me queda grande
es porque me he dicho tantos noes
que he caminado en círculos;
prefiero quedarme con que la vida es lo que tú eliges,
y que en la siguiente parada
quizá haya una vela encendida,
y sí,
esta vez toca soplar

Quizá falten los versos claves de este poema, 
pero tengo la sensación,
y no me suelo confundir,
de que se van a empezar a escribir solos.